... Pues habéis nacido de nuevo, no de una simiente corruptible, sino de una que es incorruptible, es decir, mediante la palabra de Dios que vive y permanece. Porque: TODA CARNE ES COMO LA HIERBA, Y TODA SU GLORIA COMO LA FLOR DE LA HIERBA. SECASE LA HIERBA, CAESE LA FLOR, MAS LA PALABRA DEL SEÑOR PERMANECE PARA SIEMPRE. Y esta es la palabra que os fue predicada ...
Tomado de 1ra de Pedro, capitulo 1, versos 23 al 25
No se que tanto conocen sobre el apóstol Pedro, es conocido por lo que se menciona en el vaticano, de ser "fundador" de lo que se conoce como catolicismo romano, pero me refiero que tanto conocemos sobre el, una manera directa es leyendo sus cartas, un legado increíble de como un pescador judío de galilea, atendió el llamado, y su vida fue transformada, en sus cartas encontramos reflejo de su carácter, personalidad, y sumisión al Dios Todopoderoso, es simplemente increíble.
En esta carta, que dirige a los judíos (que se convirtieron al Camino), y se ubicaban en lo que hoy se conoce como Turquía, aproximadamente en el año 63 después del Mesías, cuando se enfrentaban a la persecución consecuencia de la naciente guerra judeo-romana, toda la carta es increíble, siempre hace mención a las escrituras (levítico, salmos, etc) usando los textos directamente, en esta porción recuerda que nuestra vida, recorrido, y todo lo que hacemos y tenemos, es como la hierba y su flor, estan presentes brevemente, después ya no lo estarán.
Finaliza diciendo que la palabra de Dios, permanece para siempre, pero no se refiere a las escrituras, se refiere al Verbo, al Logos, a la Dabar, al mismo Mesías, el Señor Jesus, que es el Dios Eterno, y nosotros su pueblo, somos ciudadanos, ya no somos extranjeros o peregrino, somos su heredad, somos su nación.